Roma.- Espléndida y con ese halo de glamour que le acompaña desde que el cine la descubriera en la década de los 50, la actriz italiana Sofía Loren cumple el próximo domingo 75 años, una edad a la que el mito del Séptimo Arte de Italia llega sin haber abandonado Hollywood.
Esos tres cuartos de siglo que ha vivido Sofía Villani Scicolone (Roma, 1934) no han sido capaces de aplacar el amor que ha demostrado hacia el cine, pues su próximo cumpleaños llega dos meses antes de que se estrene el filme "Nine", inspirado en la película "Ocho y medio" (1963) de Federico Fellini y en el que la italiana da vida a la "mamma" del protagonista.
La que un día fuera la joven más deseada de Italia y uno de los rostros más admirados de Hollywood ha sabido asumir como nadie su edad y los papeles que a ella van asociados, todo conservando el atractivo de siempre y dando muestras de que, con 75 años, también es capaz de robar protagonismo a actrices más jóvenes.
En "Nine", versión del musical homónimo dirigida por el estadounidense Rob Marshall y que se estrenará el próximo 25 de noviembre en Estados Unidos, Loren comparte cartel, entre otras, con la australiana Nicole Kidman y la española Penélope Cruz, dando muestras de que su paso por Hollywood no es un recuerdo del pasado.
"Hollywood ha sido algo determinante para ella. Ha sido uno de los puntos de su carrera. Ella ha trabajado mucho en el cine estadounidense y también en el británico", comenta a Efe el presidente de la Academia de Cine de Italia, Gianluigi Rondi.
"Se ha entregado con todas sus cualidades estéticas y humanas a sus compromisos en Hollywood y es verdaderamente una de las personas de las que sentimos la falta en Italia, dado que ya no está tan presente en la escena cinematográfica como antes", añade.
No tan presente como antes, pero Loren sigue sin abandonar la profesión que le ha hecho popular, en la que conoció a su esposo, el productor Carlo Ponti, y que ha sabido compaginar a la perfección con la otra gran devoción de su vida: sus hijos Carlo y Eduardo.
La protagonista de "Dos mujeres" (1960), filme que le dio un Óscar a la Mejor Interpretación Femenina, vive actualmente en Suiza algo apartada de todo lo que rodea al mundo del cine y del estrellato, con escasas apariciones públicas y casi ninguna entrevista concedida.
De hecho, muchos de quienes la conocen o han estado en contacto con Loren alguna vez siguen siempre el mismo patrón para comunicarse con ella: esperan a que la italiana decida llamarles.
"El hecho de que viva en Suiza es simplemente porque se compró una casa allí, pero siempre ha estado muy vinculada a Italia, donde ha nacido y ha tenido una extraordinaria carrera", comenta el presidente de la Academia de Cine de Italia, uno de esos "amigos" que esperan ansiosos la llamada de la Loren.
"Es muy difícil que vuelva a haber una actriz como ella en Italia. Ella era una actriz verdaderamente completa, ya sea en el plano dramático como en el plano cómico", agrega.
En este sentido, Rondi, quien la siguió durante muchos años como crítico cinematográfico, subraya además la capacidad que ha tenido la actriz a lo largo de su carrera de saber aunar su papel de diva del cine con unas buenas interpretaciones.
"Verdaderamente es muy raro que una diva sea también una gran actriz y ella es también esto. Todos sus filmes, en toda su carrera, han sido siempre de una gran relevancia desde el punto de vista cultural y artístico", apunta.
En los últimos años, Loren se ha dedicado, sobre todo, a recoger los frutos de esa siembra cinematográfica que hizo a lo largo de varias décadas, con importantes galardones como el León de Oro del Festival Internacional de Cine de Venecia a toda su carrera en 1998 o el Óscar Honorífico en 1991.
Con "Nine", la italiana, quien llegó a pasar 17 días en la cárcel en 1982 por un supuesto fraude al fisco de Italia del que después fue absuelta, regresa a la primera plana de ese universo cinematográfico del que, ni con 75 años, se ha desligado: Hollywood.
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