.jpg)
Por : Elsa Peña NadalSanto Domingo. (Atanay.Com).-Negro Veras no se había separado de su hijo en la clínica; cuidándole la vida con la suya propia, después de largas horas de angustia temiendo que no sobreviviera al alevoso y cobarde atentado a tiros de que fuera objeto a las puertas del lugar donde trabaja.
Ya la noticia nos había llenado a todos de indignación y dolor, pero ver en el programa de Nuria Piera a don Negro Veras narrando su angustia, derramando lágrimas de ira e impotencia, fue algo que impactó y preocupó a los dominicanos decentes de este país.
El crimen ya sale del ámbito de los ajustes de cuentas entre delincuentes de toda laya, y enfoca su atención hacia gente inocente y honesta que no acepta y denuncia con valentía esas prácticas.
Fue tranquilizador, sin embargo, escuchar a don Negro Veras decir que el presidente Leonel Fernández le llamó personalmente para lamentar este hecho y garantizarle que se apresaría a los responsables.
El presidente hizo lo correcto, pues él sabe cómo actúan las mal llamadas y peor recordadas “fuerzas incontrolables”, que tanto daño hicieron a este país en los azarosos gobiernos del doctor Balaguer.
Este atentado no debe quedar impune, pues ya se une a las amenazas de muerte dirigidas a otros comunicadores, y podría sentar un precedente peligroso para la paz y la convivencia social en este país.
Cuando la delincuencia arropa y se apodera de las calles, se desborda y se hace incontrolable, pues decide entonces acallar, por sí misma, las voces que le entorpecen su accionar delincuencial.
Ya vemos, por otra parte, cómo se ha hecho una práctica recurrente, que ciudadanos desaprensivos y violentos, asesinen en plena calle a posibles delincuentes con sus propias manos, recurriendo a un salvajismo horrorizarte por lo inhumano.
Estas son señales de la falta de confianza en la justicia y del hartazgo de sectores empobrecidos que no ven salida a sus reclamos.
Ayer lloré viendo llorar a un hombre de la valía moral y de la valentía personal de don Negro Veras; como deben haberlo hecho otros padres y madres puestos en su lugar.
Y también al escuchar a su hijo Jordi cuando narraba, emocionado y balbuciente, que su esposa, lógicamente asustada, le reclamaba que pensara en sus hijos pequeños, y él le contestó que, por pensar precisamente en ellos y en su futuro, era que tenia que seguir adelante; haciendo, lógicamente, lo que casi le cuesta la vida.
Después de un excelente trabajo de los médicos que le atendieron en Santiago, y por su recomendación, Jordi ha sido traslado al The New York Eye and Ear Infirmary, a los fines de tratar de salvarle la visión de su ojo derecho.
Oremos a Dios por la pronta y total recuperación de este joven y valiente profesional dominicano, y esperemos que se haga justicia en este caso, confiados plenamente en las oportunas y alentadoras palabras y directrices del presidente Leonel Fernández.
No hay comentarios:
Publicar un comentario